No se si de verdad es utilidad lo que busco, nose si será el destacar.
Simplemente me sentí así, dejada un poco en el olvido; sentada en aquella silla con la que tropiezas por la noche. En la esquina donde tu dedo meñique casi se rompe. Con aquel sombrero puesto en la cabeza, aquel que nunca te has puesto y te estorba al coger los abrigos. Vestida con el traje de los domingos que solo te pusiste por obligación de tu madre.
lunes, 7 de septiembre de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario