viernes, 28 de agosto de 2009

Me desperté en mitad de la noche. Caminé descalza sobre el suelo frio, mis pies cálidos comenzaron a transmitir aquella sensación de inseguridad que creaba en mi piel latigazos.
Llegué en la nevera, hacía días que me había prohibido comer, como un castigo severo, con la decisión de que como buena Aries, iba a ser una gran dictadora. Por ello me quedé varios minutos observando con gula la comida, me imaginaba varias situaciones en las que mi cara era felicidad y mi boca estaba repleta. En realidad, era mentira, era un burdo cuento. Mi cara era todo un dilema de angustias. Decidí cerrar y abrir la nevera varias veces con la idea de que desaparecería al comida y asunto resuelto. Eso no sucedió nunca. Lo que estaba desapareciendo era mi cordura.

martes, 25 de agosto de 2009

Crecí entre un atmósfera putrefacta. Mis primeros pasos los empañaron el humo de la sociedad, no podía reirme por miedo a quedar deborada por los gases tóxicos de la crueldad.
No lloraba por temor a que mi cara de muñeca de porcelana no viera nuevos horizontes.

Viví deprisa, caminé despacio. Me rompí los huesos escalando las posiblidades y allí nada, allí no encontré nada.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Acabo de despertarme y ya me duele el corazón.
Empapado en sangre y sudor, dejó de palpitar a las tres de la mañana, cuando tu mano dejó de acariciarlo. Ahora busco frenética la solución.
Me quedan 5 minutos.

lunes, 17 de agosto de 2009

Aquella noche, en el sillón quise ser tuya.
Que tus párpados me abrigaran, me abrazaran con las pestañas y me llevaran a un mundo de deseo y pasión.
Quise que tus manos se adentraran en mi interior, que tocaran puntos que ensalzaran mi feminidad. Sentirme como un instrumento, que sonara al ritmo de tus fantasías.

Me digiste, aquella noche, entre sudor y saliba, que estando conmigo nunca saldrias de mi

sábado, 15 de agosto de 2009

Lamento ser esa chica, rubia, de ojos grandes y llamativos;
que, a veces, pide perdón sin saber lo que ha hecho mal.
Que siente frustración y miedo por el devenir.

viernes, 14 de agosto de 2009

Se fue quitando el vestido de una manera fácil y sensual, nada preconcebida y muchos menos descarada. Se fue deslizando poco a poco debido al sudor que le recorría al espalda.Estaba deseando ser tocada, examinada, observada por aquel acompañante. Sabía que no era la manera más adecuada, pero ella nunca había jurado lealtad a la educación. Le gustaba el descaro, y ese era su traje de noche.

Era para él, solo para él de puertas para dentro, por completo. No el intimidaba. Jugaba bien sus cartas, ponía sus reglas y marcaba su terreno. Pero no se dió cuenta de cerrar su corazón, de que esa noche quedaría embriagada por una sensación que su cuerpo habái tenido. El amor.

Marta quedó marcada para siempre.

jueves, 13 de agosto de 2009

Tuve el sentimiento de que viviamos juntos,
de que nos amabamos a todas horas.

Tuve la necesidad de ti a cada instante,
aunque estuvieras a mi lado durante horas.

He reconocido que estoy empapelada de cartas de amor,
de frases y de situaciones durante este tiempo.

Pero ahora te has ido y es como si no supiera hacer nada sin tu presencia.

martes, 11 de agosto de 2009

La gente teme llorar, yo todo lo contrario.
La gente teme amar, yo todo lo contrario.
La gente teme sufrir, yo todo lo contrario.
La gente teme sentir, yo todo lo contario.

Yo temo al temer.

viernes, 7 de agosto de 2009

He reconocido de nuevo la sensación de andar por el mundo sin ningún peso encima.
¿Cómo puedo hacerme ese daño? después de todo, después de aquello.
Me creo el verdugo y la víctima al mismo tiempo. Estoy en la diana, preparada para que la flecha me destroce y descubra que debajo de todo este disfraz sigo estando yo.

Ya no se que hacer. Grito, pataleo, lloro, muerdo. Lo que pasa que lo hago todo en soledad, cuando las puertas de mi casa se cierran y dejo en el felpudo de la entrada la imagen de felicidad. Si alguien huele a muerto, es mi alma.

jueves, 6 de agosto de 2009

La curiosidad es una sensación que le seducía. Como un felino se apresuraba a conocer todos los recovecos de su anatomía. Torso, tripa, cara, pierna y un sin fín de zonas que toqueteaba cada vez que podía, tanto en directo, como en las noches de soledad cuando su cabeza dibujaba en sueños su cuerpo.

Un día se vió capaz de dibujar con carboncillo su perfil y se dio cuenta que admiraba más el cuerpo de su amante que el suyo propio. Se había dejado de cuidar, de preocuparse por su estado, por sus necesidades, por sus gustos; tanto que en lugar de ver su cara reflejada en el espejo veía la cara de él.

miércoles, 5 de agosto de 2009

Se fue deslizando por la habitación, como si desde alguna de las esquinas, una música le indicara como apaciguar sus nervios y le mostrara la forma más fácil de andar. Sus pies tomaron ahora el control de su cabeza, un, dos, tres; giro; un, dos, tres;giro.
Mientras, en el sillón, él la observaba, silencioso, callado, para que ni es simple parpadeo o respiración acabaran con ese momento mágico.

- ¿Es verdad que puedes crear belleza a través de un simple movimiento?
- Tú, eres todo belleza sin que emitas ningún movimiento.

Ella sonrió, se sonrojó y emitió una risita dulce que hizo que el corazón de él se acelerara.

Aquellas tardes, resguardándose del sol, de las altas temperaturas, con solo una sábana como muro para protegerse de la cruel sociedad, fue testigo de sus deseos más carnales en cuerpos todavía jóvenes, débiles ante el dolor del primer amor