domingo, 11 de diciembre de 2011

Hubo una historia
con finales anteponiéndose a las causas.
Una chica de gran sonrisa y lagrimal delicado.
Temerosa de sus propios movimientos, de sus propias sombras, de sus pequeños pasos.

Hubo una historia
con principios anteponiéndose a las consecuencias.
Un chico de pequeña sonrisa y lagrimal vacío.
Temeroso de sus pies paralizados, de las luces alumbrando sus grandes pasos.

Hubo una historia, reflejada en sus pupilas, que alguien contó en voz baja.

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